物理治疗与身体康复杂志

La obesidad infantil es un importante desafío de salud pública del siglo XXI, con consecuencias para la salud de por vida. Los objetivos son: (1) evaluar el efecto del conocimiento del niño sobre los alimentos y las preferencias alimentarias en el índice de masa corporal (IMC) del niño. (2) investigar la relación entre el IMC del niño y el conocimiento nutricional de la madre y la actitud hacia la comida saludable. La recopilación de datos se llevó a cabo desde noviembre de 2017 hasta febrero de 2018. Se utilizó una técnica de muestreo aleatorio por conglomerados estratificado en múltiples etapas. Se seleccionaron cuatro escuelas en función del tamaño y se incluyó un número igual de participantes de cada conglomerado. De cada grado, se seleccionó una clase al azar. De un total de 442 estudiantes medidos por IMC, se incluyeron en el estudio un total de 116 casos y 232 controles. Se registraron el peso y la altura, se calculó el IMC y los estudiantes se dividieron en el grupo obeso / con sobrepeso y el grupo de peso normal, del cual se seleccionaron aleatoriamente los casos y el control a partir de entonces. Los datos se recogieron mediante una entrevista personal con la niña y se envió un cuestionario autoadministrado a la madre de la estudiante. Los resultados se presentaron como Odds Ratio ajustado (aOR) e intervalos de confianza (IC) del 95%.  Después de controlar las variables de confusión, las preferencias alimentarias más saludables en los niños y un mayor conocimiento de la madre se asociaron con una reducción del 77% y 51% de las probabilidades de obesidad (aOR = 0,23 IC del 95%: 0,09-0,64 y aOR = 0,49 IC del 95%: 0,33-0,71).  Las preferencias alimentarias saludables entre las niñas y el conocimiento nutricional adecuado entre sus madres se asociaron significativamente con una disminución de la obesidad en las niñas.  Diagrama de bosque que muestra una odds ratio ajustada de sobrepeso-obesidad y un intervalo de confianza del 95% para diferentes factores de riesgo.